Introducción a la unidad de estado sólido (SSD)

La unidad de estado sólido (SSD) es un dispositivo de almacenamiento de estado sólido que utiliza ensamblajes de circuitos integrados como memoria para almacenar datos. SSD también se conoce como disco de estado sólido, aunque los SSD no tienen discos físicos. Las SSD pueden utilizar factores de forma y protocolos como SATA y SAS de la unidad de disco duro tradicional (HDD), lo que simplifica en gran medida el uso de SSD en las computadoras. Se han desarrollado nuevos factores de forma, como el factor de forma M.2, y nuevos protocolos de E/S, como NVM Express, para abordar requisitos específicos de la tecnología de memoria Flash utilizada en SSD. 

No hay componentes mecánicos móviles en SSD. Esto los diferencia de las unidades electromecánicas convencionales , como las unidades de disco duro (HDD) o los disquetes, que contienen cabezales móviles de lectura/escritura y discos giratorios. Los SSD suelen ser más resistentes a los golpes físicos, funcionan en silencio, tienen un tiempo de acceso más rápido y una latencia más baja en comparación con los dispositivos electromecánicos. El precio de los SSD ha seguido disminuyendo con el tiempo, pero los SSD en 2018 siguen siendo más caros por unidad de almacenamiento que los HDD y se espera que sigan siéndolo en la próxima década. 

En 2017, la mayoría de los SSD usan memoria flash basada en 3D TLC NAND. Es un tipo de memoria no volátil que retiene datos incluso cuando se pierde la energía. Los SSD pueden construirse a partir de memoria de acceso aleatorio (RAM) para aplicaciones que requieren acceso rápido pero no necesariamente persistencia de datos después de una pérdida de energía. Las baterías se pueden emplear como fuentes de alimentación integradas en dichos dispositivos para retener datos durante un cierto período de tiempo después de que se pierde la alimentación externa. 

Los SSD almacenan datos en cargas eléctricas, que se filtran lentamente con el tiempo si se quedan sin energía. Esta es la razón por la que las SSD no son adecuadas para fines de archivo, ya que las unidades desgastadas (que han excedido su índice de resistencia) comienzan a perder datos normalmente después de uno (si se almacenan a 30 °C) o dos (a 25 °C) años en almacenamiento. 

Las unidades híbridas o unidades híbridas de estado sólido (SSHD) contienen una unidad de disco duro grande y una caché SSD para mejorar el rendimiento de los datos a los que se accede con frecuencia. Fusion Drive de Apple combina las características de SSD y HDD en la misma unidad y puede verse como un ejemplo de unidades híbridas.

Publicación traducida automáticamente

Artículo escrito por Ayusharma0698 y traducido por Barcelona Geeks. The original can be accessed here. Licence: CCBY-SA

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