La esteganografía puede ser referida como un arte de comunicación invisible. Oculta la presencia misma de la comunicación sin dejar ninguna evidencia aparente. En otras palabras, la esteganografía es una técnica para ocultar información secreta de tal manera que un extraño ni siquiera pueda sentir la presencia del mensaje incrustado. El medio utilizado para ocultar la información se denomina objeto de cobertura. Según el objeto de portada, las técnicas esteganográficas se pueden clasificar como esteganografía de imagen, esteganografía de audio, esteganografía de video, esteganografía de texto, etc. En el caso de la esteganografía de imagen, la imagen con datos ocultos se denomina estegoimagen. La siguiente figura muestra un sistema esteganográfico básico de imágenes.
Evidencia temprana de esteganografía:
aunque el término «esteganografía» se acuñó a fines del siglo XV, la historia de la esteganografía se remonta al 440 a. Se derivó de la combinación de las dos palabras griegas, «stegano» y «grafia», que significan cubierto/secreto y escritura/dibujo respectivamente. Antiguamente, las diferentes formas que se utilizaban para ocultar los mensajes secretos eran tatuarse en el cuero cabelludo de los esclavos, esconderse en tablillas recubiertas de cera, escribir en el estómago de los conejos, etc.
Tatuaje en el cuero cabelludo de los esclavos:
la evidencia más antigua conocida de esteganografía fue citada por Heródoto durante 484-425 a. Él dicta cómo Histiaeus (su amo), envió a uno de sus esclavos a la ciudad jónica de Mileto con una información secreta escondida en su cuerpo. En primer lugar, el mensaje se tatuaba en el cuero cabelludo del esclavo o portador después de afeitarse la cabeza. El esclavo fue enviado a la ciudad jónica de Mileto solo después de dejar crecer su cabello. Una vez que el mensajero llegaba al destino, se afeitaba nuevamente la cabeza del esclavo para poder descifrar el mensaje secreto. Heródoto también documentó cómo Demerato informó a Esparta sobre la intención de Jerjes de invadir Grecia.
Tabletas recubiertas de cera:
como otra evidencia temprana de la esteganografía, las tabletas recubiertas de cera se usaban para escribir texto en la antigua Grecia. Para preservar el secreto de los mensajes, se quitó la capa de cera de las tabletas y se grabó el mensaje en la madera subyacente. Después de escribir el mensaje secreto, la tablilla se volvía a cubrir con cera. Como no había evidencia aparente de la presencia del mensaje en las tablillas, sin duda pasaron fácilmente la inspección de los centinelas. El mensaje incrustado solo se puede decodificar raspando toda la cera.
Pendientes de mujer:
el escritor griego Eneas Tactician propuso otro enfoque esteganográfico. Su idea fue elegir los aretes de mujer como medio para ocultar información secreta. También propuso la idea de usar palomas para entregar mensajes secretos.
Tintas invisibles:
Aparte de los métodos mencionados, otra técnica antigua utilizada para ocultar mensajes era el uso de “tintas invisibles”. El uso de tintas invisibles para ocultar datos se remonta al siglo I d.C. En la antigüedad, los romanos solían ocultar mensajes secretos escribiendo entre líneas con la ayuda de tintas invisibles. En aquellos días, las tintas invisibles se derivaban de sustancias fácilmente disponibles como la orina, la leche y los jugos de frutas. Al calentar la letra, el mensaje secreto podría calentarse, oscureciendo así el texto y el mensaje secreto podría revelarse o decodificarse. Otra técnica utilizada para descifrar el mensaje fue agregar pequeñas cantidades de negro de carbón u hollín en la letra que se pegaría a la tinta invisible.
Con el avance de la ciencia, a medida que avanzaba la rama de la química, se cooperaron nuevas técnicas con el método de tinta invisible para ocultar datos secretos. Por ejemplo, el ácido galotánico hecho de agallas se usó como tinta invisible. Lo oculto se puede revelar pintándolo con sulfato de cobre. Otro método químico temprano que se usó durante la Segunda Guerra Mundial fue escribir un mensaje secreto usando una solución de sulfato de cobre en un pañuelo y descifrarlo exponiéndolo a vapores de amoníaco.
Durante los siglos XV y XVI las técnicas esteganográficas continuaron desarrollándose y verdaderamente florecieron en el siglo XX.
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Artículo escrito por swetha_vazhakkat y traducido por Barcelona Geeks. The original can be accessed here. Licence: CCBY-SA