La imaginación es a la tecnología como el combustible al fuego. La imaginación y el propósito juntos impulsan la tecnología. Es debido a esto que la tecnología hoy en día está evolucionando a un ritmo exponencial. La realidad virtual, por un lado, coloca al espectador dentro de un momento o un lugar, lo que es posible gracias a la tecnología visual y de sonido que maniobra el cerebro para que crea que está en otro lugar. Es una experiencia de un mundo que no existe. Suena genial, ¿verdad?
La realidad virtual engaña a la mente usando computadoras que le permiten experimentar y, lo que es más interesante, interactuar con un mundo en 3D. Esto es posible al colocar una pantalla montada en la cabeza que envía una forma de seguimiento de entrada. La pantalla se divide entre los ojos y, por lo tanto, crea un efecto 3D estereoscópico con sonido estéreo para brindarle una experiencia gráfica. La tecnología alimenta las imágenes de los objetos tomadas en ángulos ligeramente diferentes, lo que crea una impresión de profundidad y solidez. Los paneles LCD u OLED en el interior son refractados por lentes que llenan completamente el campo de visión con lo que se va a mostrar y experimentar. Junto con la tecnología y el seguimiento de entrada, crea un mundo creíble inmersivo y emocionante que genera la computadora.
Lo que conocemos hoy como VR existe desde hace décadas. Regresando a cuando las pinturas de 360° tomaron al mundo por sorpresa, dando un elemento virtual. VR simplemente es ‘The Wise Guy’ del mundo digital. Crea un mundo que no funciona de acuerdo a ti, ni responde a tus acciones. Le brinda una experiencia de primera mano incluso con los efectos secundarios de un evento junto con la capacidad de interactuar e interrelacionarse con el mundo creado.
Esta tecnología contiene una gran cantidad de conocimientos potenciales sobre el funcionamiento del cerebro humano. Según investigadores y especialistas médicos, los VR tienen la capacidad de diagnosticar condiciones médicas que van desde la ansiedad social hasta el dolor crónico. Aunque el uso de la realidad virtual para modificar el cerebro aún se encuentra en una etapa incipiente. Si bien la mayoría de las personas estaban demasiado absortas en sus avances y saltaban a los juegos y exploraban la industria, muchos desconocen sus logros en el sector de la salud. Los VR han estado tratando con éxito el trastorno de estrés postraumático desde la década de 1990, por lo que los nuevos programas abordan una gama mucho más amplia de condiciones. El contenido de realidad virtual expone a los pacientes a un entorno virtual, seguro y controlado donde pueden explorar y eventualmente aprender que las amenazas que les preocupan pueden abordarse con paciencia, tiempo, reflexión y análisis.
Las pantallas de realidad virtual están disponibles en varias formas. Desde los que ya contienen la pantalla, dividiendo la transmisión para cada ojo mediante un cable para transferir la transmisión a la consola, hasta los más asequibles que dependen del modo VR y las aplicaciones en los teléfonos inteligentes. HTC Vive, Oculus Rift y Sony PlayStation VR son algunos de los soportes para la cabeza que utilizan esta configuración. Uno puede crear su propia Caja de Realidad Virtual en casa, junto con un teléfono inteligente compatible con el modo VR. Independientemente del uso, la Realidad Virtual produce un conjunto de datos que se pueden utilizar para desarrollar modelos, comunicación, métodos de entrenamiento e interacción. En palabras simples, las posibilidades son infinitas.
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Artículo escrito por anikait8900 y traducido por Barcelona Geeks. The original can be accessed here. Licence: CCBY-SA